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¿Cómo reaccionar cuándo mi hijo se porta mal para llamar la atención?

Fotografía de Freepik.

Cuando un niño se porta mal para llamar la atención, puede ser frustrante para nosotros como padres; este tipo de comportamiento puede presentarse de varias maneras.

Actuar de forma disruptiva, desobedecer reglas, ser agresivo o buscar constantemente la atención negativa de quienes los rodean, son algunas de ellas. Pero, ¿qué hacer cuando un niño se porta mal para llamar la atención?

Detrás de este tipo de acciones está la necesidad de conexión emocional y reconocimiento, pues los menores que recurren a estas conductas expresan que se sienten ignorados, aburridos, solos o hasta inseguros.

Al contener esa emoción, podemos ayudarle a desarrollar estrategias más saludables y fortalecer el vínculo emocional con quienes lo rodean.

¿Qué hacer cuando mi hijo se porta mal?

Cuando los niños entran en esa etapa de rebeldía, hay que abordar su comportamiento de forma efectiva y comprensiva, antes que confrontarlos, pues esto puede provocar que continúe. Siempre hay que dar atención positiva, poniendo límites y enseñando habilidades de comunicación adecuadas.

Reflexionar sobre las causas

Primeramente, hay que tratar de comprender por qué el niño busca atención de esa manera, siempre la hay, pero tienes que plantearte la pregunta desde su lógica. Quizás se siente ignorado, aburrido, frustrado o simplemente busca más interacción y conexión emocional con sus padres.

Da atención positiva

Asegúrate de que el niño reciba suficiente atención positiva cuando se comporta adecuadamente, sea en casa o en clase; elogia y recompensa sus buenos comportamientos y dedícale tiempo de calidad, para jugar y conversar. Si solo le prestas atención en los momentos difíciles, lo único que harás es reforzar ese accionar negativo.

Establece límites claros

Demasiadas libertades le dan a los niños la idea errónea de lo que es el respeto, así que hazle saber lo que se espera de él y las consecuencias de su comportamiento inadecuado; sé firme y coherente al sancionarlo, pero evita castigos muy severos o humillantes.

Enséñales habilidades de comunicación

Ayuda a tu hijo a aprender maneras apropiadas de expresar sus necesidades y emociones, usando sus propias palabras y hacerle sentir que lo escuchas. Anímalo a hablar abiertamente contigo sobre lo que le preocupa o molesta y ofrécele alternativas saludables para llamar la atención, como pedir ayuda o hablar de sus sentimientos.

Dale responsabilidades

Al hacerlo, siempre adecuadas a su edad y capacidades, aumenta su sentido de pertenencia y autoestima. Involúcralo en tareas domésticas o actividades familiares, para que desvíe su atención hacia algo positivo y constructivo, pues hacerlos sentir útiles, ayuda a que su mente se ocupe.

Con información de Soy Aire / Imagen de jcomp en Freepik.

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