Consejos para evitar que tus toallas queden duras al lavarlas
Clásico: siempre que lavas tus toallas quedan ásperas y duras, rasposas al contacto de nuestra piel, y no es hasta que la usamos varias veces que recupera su textura suave.
En ocasiones esto ocurre porque no leemos las instrucciones de lavado de las etiquetas o simplemente las echamos a la lavadora como una prenda más.
Quizás te dé igual como esté la toalla, pero es probable que en casa haya bebés, niños o algún adulto con piel sensible que le moleste esta situación.
Por tal motivo, te enumeramos las posibles causas de que las toallas estén ásperas y la forma en que se puede solucionar.
1.- Tipo de jabón
El jabón en polvo en exceso puede acumularse en las fibras de la toalla y ocasionar que al secarse, quede totalmente tiesa. Para evitarlo, usa la cantidad indicada por el fabricante o según la instrucción que viene en la prenda.
Si la toalla tiene está muy sucia, colócala en una cubeta con agua días antes de lavarla.
2.- Secado
Aunque se cree que secar las toallas bajo los rayos del sol no las estropeará, la realidad es que sí se afectarán, sobre todo si son nuevas.
Lo ideal es dejarlas en un lugar fresco, con sobra, donde puedas extenderlas sin problema. No olvides dejar espacio entre cada toalla para que se sequen y no guarden humedad.
3.- Suavizante
Por más que le eches suavizante, las toallas no recobrarán su suavidad, sino al contario. Antes de echar suavizante a la lavadora, revisa la etiqueta de las toallas y utiliza la cantidad recomendada; al terminar el lavado, vuelve a enjuagar para eliminar el exceso de producto.
En el caso de que las razones antes planteadas te suenen familiares, piensa en la calidad de la toalla o si las planchas para que queden suavecitas. Estos dos indicadores podrían ocasionar que tus toallas se vuelvan ásperas.
Con información de Cocina Delirante.