Desde reciclables y reutilizables hasta comestibles, conoce los distintos tipos de popotes ecológicos
Los popotes de plástico que utilizamos para tomar diferentes bebidas pueden tardar hasta 500 años en descomponerse, lo que ocasiona graves daños en los ecosistemas marinos y en las aves.
Afortunadamente en la actualidad existen alternativas reutilizables y biodegradables que nos permiten seguir usando estos productos sin generar tantos daños en el medio ambiente.
En el mundo se utilizan mil millones de popotes diarios, tan solo en Estados Unidos se usan 500 millones cada día.
Estos artículos, también llamadas pajillas, forman parte de las más de 10 millones de toneladas de plástico que termina en los océanos al año. Además de afectarnos a los seres humanos, repercute en más de medio millón de aves y más de cien mil mamíferos que mueren cada año a causa de los desperdicios de este material.
Se estima que entre el 40 y 60 por ciento de las tortugas ingieren plásticos y que en algunas especies de aves, este porcentaje se incrementa hasta el 93 por ciento.
Alternativas menos dañinas
Como mencionábamos, existen otras opciones al clásico popote de plástico. Las hay desechables, comestibles y reutilizables:
DESECHABLES
- De trigo natural: Una espiga de trigo 100 por ciento natural y biodegradable.
- De fibra de caña de azúcar: También conocidas como popote de bagazo, están hechos a partir de la caña de azúcar.
COMESTIBLES
- De pasta: Se hacen con agua y trigo natural, como la pasta que cocinamos en casa.
- De fibra de manzana natural: Esta es una opción comestible hecha a base de fibra de manzana. Son biodegradables y sin azúcares añadidos.
REUTILIZABLES Y PERSONALIZABLES
- De caña: Provienen del carrizo, planta que crece en todo el mundo, por lo que son 100 por ciento naturales.
- De bambú: Considerado como uno de los principales recursos renovables y un excelente consumidor de CO2.
- De acero inoxidable: Son de los más comunes, se pueden limpiar con facilidad y reutilizar tantas veces como se quiera sin afectar el sabor de las bebidas, pues no dejan sabor metálico.
- De vidrio: Al igual que los vasos, se pueden lavar y volver a usar.
- De silicona: Tienen la ventaja de ser flexibles y plegarse con facilidad. No contienen PVC.
Con información de Bioguia.