El cerebro sí cambia durante la Navidad, confirma estudio
La Navidad es una celebración esperada por muchos, en el que nos sentimos mucho mejor que en cualquier mes del año. Ahora la ciencia ha confirmado que nuestro cerebro cambia durante las fiestas decembrinas.
Según las investigaciones hechas, los estímulos que hay en el entorno esta época del año tienen un impacto en la producción de diferentes neurotransmisores que intervienen con nuestro bienestar, como la dopamina, serotonina, cortisol, adrenalina, oxitocina, etc.
Fueron científicos de la Universidad de Copenhague quienes hicieron una investigación sobre los efectos de la Navidad en el cerebro de las personas, así que probaron por medio de imágenes tomadas con resonancia magnética funcional.
Para dicho experimento partieron de dos grupos de personas, quienes celebran y tienen una imagen positiva de la Navidad, y quienes opinan todo lo contrario.
Al reproducir estímulos, el cerebro de las personas con espíritu navideño empezó a reaccionar; específicamente, los científicos detectaron que se activó la corteza motora sensorial, motora primaria y premotora, así como el lóbulo parietal.
En contraparte, las personas que no acostumbran celebrar esta festividad, además de tener una imagen negativa de la Navidad, no tenían estas reacciones.
Lo anterior dejó como conclusión que el espíritu de la Navidad no es un mito, pues las personas que lo tienen presente en su vida tienen reacciones químicas en el cerebro que son temporales y que afectan desde su estado de ánimo, hasta la forma en la que piensan y actúan.
Como podemos ver, las experiencias que tenemos a lo largo de nuestra vida nos cambian, en este caso, evoca en nosotros sensaciones, emociones y recuerdos profundos que nos construyen de forma emocional, física y anímicamente.
Las áreas del cerebro que activa el espíritu de la Navidad en el cerebro están relacionadas con la espiritualidad, los sentidos somáticos y el reconocimiento de la emoción facial, entre muchas otras funciones, de acuerdo a los expertos.
Seguir con estas tradiciones puede parecer algo banal y vinculado al consumismo, pero cuando lo vivimos de forma pura, podemos llenarnos de esa sensación maravillosa que la caracteriza, con optimismo.
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