¿Entrevista de trabajo? Cuáles son los colores que hay que llevar para proyectar una imagen positiva
Como quizás lo sepas, al momento de presentarnos a una entrevista laboral hay que cuidar todos los detalles: la forma en que nos expresamos, la redacción del CV, actitudes, nuestra vestimenta, etc.
Hablando precisamente de la ropa, debemos tomar en cuenta que los colores de nuestras prendas nos ayudan a proyectar más de lo que piensas. Existen ciertos tonos mejores que otros para llevar a una entrevista, los cuales te ayudarán a transmitir el mensaje adecuado y a quedarte con el puesto que deseas.
Si bien todos tenemos un color favorito, que es válido llevarlo en el día a día, al momento de presentarte con un empleador es necesario saber que el tono que llevamos el día de la entrevista puede hacer pensar mucho al reclutador.
Ahora bien, ¿qué significa cada color?
Negro: Opción segura para faldas, pantalones o trajes, sin embargo, evita excederte en su uso, mejor contrástalo con algún blanco. Procura que las prendas negras no se vean desteñidas, pues eso hace que pierda formalidad.
Azul marino: Tono seguro en el mundo laboral y favorable para casi todos los tonos de piel. Al igual que el negro, denota formalidad y sobre todo, profesionalismo.
Gris: Es un color distinguido pero que no realza los tonos de piel, llegando a resultar un poco apagado en ocasiones.
Amarillo: Es creativo, enérgico, positivo y alegre, pero no está ligado al pensamiento lógico o estratégico. No se recomienda abusar de él, pues puedes llamar mucho la atención y hasta deslumbrar al entrevistador.
Rojo: Un color engañoso y contradictorio que representa al amor, pero también a la ira y agresión. El rojo resulta muy dominante, pero es un clásico para las corbatas, así que no te excedas en su uso.
Rosa: Un color clásico en las mujeres, pero que también pueden llevar los hombres. Cuidado con el rosa fuerte, pues este puede reflejar un deseo de llamar la atención.
Azul: Una buena opción al ser un color que refleja paz, calma y empatía.
Marrón: Poco recomendable al considerarse de antaño, aburrido y fuera de moda.
Verde: Es suave y accesible, ligado a los temas ambientales. No es favorable para muchos tonos de piel, pues este puede reflejarse en la cara y provocar un aspecto de mareo.
Naranja: Si bien es un color positivo, puede resultar chillante o cansado para la vista, por lo que no se recomienda para una entrevista.
Blanco: Puro, limpio y elegante, puedes combinarlo con más colores y refleja mucha seguridad.
Beige: Puede sugerir una personalidad sosa, por lo que se recomienda combinarlo para que realce más, pues puede llegar a verse aburrido.
Caramelo: Este tono algo más intenso implica más personalidad y confianza que el beige.
Con información de OCC Mundial.
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