Cocina

Así puedes deshidratar frutas y verduras desde casa

Fotografía de Freepik.

De seguro en más de una ocasión has encontrado en las tiendas frutas y verduras deshidratadas, cortadas de las formas más variadas.

Deshidratar no es más que eliminar la concentración de agua que tiene el alimento en su interior, ya sea a través del calor o frío. Con dicha técnica, que viene desde hace miles de años, el producto se seca, puede conservarse durante mucho más tiempo y aunque cambia su sabor y textura, mantiene sus propiedades nutricionales.

Para hacerlo en casa, podemos ayudarnos del horno y/o el microondas. Se pueden deshidratar todos los alimentos que posean un alto porcentaje de agua, como carnes, pescados, hierbas aromáticas o frutas y verduras, que es de las cuales hablaremos en este artículo.

A continuación te presentamos su respectivo procedimiento.

HORNO:

1.- Toma la fruta o verdura que desees, que esté en su punto óptimo de maduración. Lávalas y sécalas muy bien.

2.- Puedes optar por pelarlas o dejarles su piel, mientras elimines cualquier parte que tenga dañada.

3.- Córtalas en rodajas o tiras del mismo tamaño.

4.- Si lo deseas, puedes escaldarlas en agua hirviendo por unos segundos, para desactivar las enzimas que producen la oxidación.

5.- Mételas al horno, poniendo la bandeja, con papel o silicona, a altura media y con una temperatura de alrededor de 60°. En caso de que tu horno no tenga disponible una temperatura tan baja, ponlo más bajo posible y no cierres del todo la puerta, para que circule el aire y de paso, procuremos que el horno no alcance más de la temperatura deseada.

6.- Dales vueltas cada 20-30 minutos hasta que veas que ya están secas. Dependiendo del alimento y el horno, puede durar entre 2 y 4 horas.

7.- Una vez fuera del horno, deja enfriar y consérvalas en recipientes herméticos.

Tomates secos en un tazón Foto gratis

MICROONDAS:

1.- Toma la fruta o verdura que desees, que esté en su punto óptimo de maduración. Lávalas y sécalas muy bien.

2.- Puedes optar por pelarlas o dejarles su piel, mientras elimines cualquier parte que tenga dañada.

3.- Córtalas en rodajas o tiras del mismo tamaño.

4.- Ponlas directamente en el plato giratorio del microondas o en otro, dejando una distancia de 2 a 3 cm de distancia entre cada porción.

5.- Selecciona la función de “descongelar” y ponlo a funcionar en intervalos de 10 minutos hasta un total de 30, comprobando su estado.

6.- Si después de esos 30 minutos el producto sigue húmedo en su interior, pon otros 5 minutos más.

7.- Deja enfriar a temperatura ambiente y después guarda en un bote hermético de cristal, donde aguantará 10 a 15 días.

Con información de Hola!

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