Así puedes recuperar la flora intestinal de forma natural
La flora intestinal está compuesta por microorganismos que se encargan de mejorar nuestra digestión. Algunos alimentos que consumimos pueden ayudarnos a mantenerla y recuperarla, por ejemplo, aquellos que contienen prebióticos y probióticos.
De manera más específica, la flora intestinal está conformada por una serie de bacterias conocidas como la microbiota, las cuales viven dentro del, en el intestino, en perfecta simbiosis. Tenemos cerca de cien billones de bacterias beneficiosas de entre 500 y mil especies diferentes.
No obstante, existen otras 100 especies que pueden ser peligrosas, por lo cual la flora intestinal es importante para el sistema inmune.
Estas bacterias colaboran en la digestión de los alimentos, ayudándonos a descomponerlos y producir vitamina K y B. Ellas se proveen a la vez que nosotros tomamos de la comida los nutrientes que necesitamos.
¿Por qué es tan importante para nuestro organismo?
Cumple con tres funciones esenciales para el ser humano, sin las cuales nuestra vida sería más difícil y mucho más corta.
- La microbiota tiene una función nutricional porque se encarga de la síntesis de diversos compuestos, en particular de las vitaminas K y del grupo B. También facilita la absorción de calcio y hierro en el colon y favorece el movimiento intestinal.
- Tiene una función protectora porque impide la implantación de bacterias patógenas externas que pueden provocar infecciones.
- Tener una flora intestinal saludable significa una buena salud por su función inmunológica que activa y fortalece nuestras defensas frente a infecciones bacterianas y víricas.
¿Cómo saber si tengo la flora intestinal dañada?
Algunos de los síntomas que pueden indicar tienes la flora intestinal dañada son:
- Hinchazón abdominal sin causa aparente y presencia de gases.
- Períodos de alternancia entre estreñimiento y diarrea.
- Cólicos, dolor en el abdomen y en la zona del vientre.
Cuando se daña la flora intestinal perdiendo su equilibrio, el organismo queda más expuesto a virus y bacterias perjudiciales.
¿Qué altera la flora intestinal?
Existen diversos factores por los cuales la microbiota puede verse alterada. Algunos de ellos son:
1.- Una mala alimentación, que no tiene la suficiente fibra y exceso de carnes, grasas y azúcares es uno de las cosas que más afecta el equilibrio de la flora intestinal.
2.- Malos hábitos como el sedentarismo, estrés, consumo de alcohol y tabaco. También trastornos como el consumo de alcohol y tabaco.
3.- La ingesta de algunos medicamentos como antibióticos que pueden generar problemas en la flora intestinal, pues si bien su función es combatir aquellos que producen la infección, también pueden provocar que en el proceso se desequilibren.
4.- El envejecimiento es un factor de riesgo, pues a medida que nos hacemos mayores disminuye el número de bacterias beneficiosas.
5.- Tratamientos post operatorios.
6.- Viajar a otros lugares del mundo con diferentes condiciones en la higiene o con climas tropicales puede producir lo que se denomina la ‘diarrea del viajero’. Si bebemos agua embotellada y nos lavamos correctamente las manos, reducimos un poco las probabilidades de padecerla.
¿Qué comer para recuperar la flora intestinal?
Una vez que sabes que tienes un desequilibrio, lo importante es saber cómo recuperar la flora intestinal dañada de forma natural.
Hay ciertos de alimentos que se deben consumir porque contienen prebióticos y probióticos. Los primeros servirán de alimento para las bacterias buenas que viven en nuestros intestinos, mientras que los segundos son los organismos vivos que consiguen repoblar nuestra flora.
Podemos encontrar prebióticos en los plátanos, las alcachofas o alcauciles, el tomate, el trigo integral, las cebollas y/o el puerro, mientras que los probióticos se encuentran en los productos fermentados como los yogures naturales o el kéfir de leche.
Si quieres recuperar la flora intestinal dañada de forma natural, incorpora diariamente productos fermentados como el yogur, el queso crudo (realizado con leche cruda y sin pasteurizar), verduras fermentadas como el chucrut y el kimchi, kéfir de leche.
También es importante ocuparse de remojar lo suficiente las semillas y las legumbres, activar las frutas secas como las almendras, nueces e intentar incorporar los fermentos en las harinas, como ocurre con el pan de masa madre.
Además, es importante llevar una alimentación variada con muchas semillas, legumbres, frutas y verduras; realizar actividad física, evitar el consumo de tabaco y de alcohol son otras de las acciones que puedes tomar para recuperar la flora intestinal dañada.
Con información de Bioguia.
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