Cómo hacer que te rinda mejor el tiempo este año
Ya han transcurrido los primeros días del año y es hora de que salgas de ese letargo posfestejo. El curso natural de tu vida sigue, las rutinas se van reacomodando y lo habitual de tus jornadas comienza a retomar, tal vez lenta pero seguramente, su ritmo. Con ello, a pesar de que no disfrutaste tanto la Navidad como otros, aprovechaste el cierre de 2017 para reflexionar y comenzar estos nuevos 365 días —361, para ser exactos— que te quedan por delante para hacer cambios, proponerte metas y objetivos que, a simple vista y en teoría, lucen alcanzables de una manera fácil.
En fin, en unos años te preguntarás qué hiciste con tu vida, dónde dejaste tus pasiones y tus sueños. Quizás descubras que todo ese tiempo estuviste cumpliendo con responsabilidades como el trabajo o el estudio y que todos los días dijiste “mañana a aprender ese otro idioma”, o “practicar ese instrumento que tanto te encantaba”, o “visitar a tus abuelos” o simplemente a pasar tiempo contigo mismo.
Hoy sientes que no te alcanza el tiempo para nada, que el día se va muy rápido y que estás dejando de lado tus gustos y hobbies por cumplir con tus obligaciones. Bueno, quizás no sea falta de tiempo, quizás no eres muy organizado y, aunque lo seas, estas recomendaciones pueden ayudar a que lo seas aún más y le saques provecho a tu tiempo y a tu vida.
Prioridades
Sí, esto es llover sobre mojado, pero es superimportante que sepas qué es prioritario en tu vida. ¿Ganar dinero? Bueno, dedica tiempo a eso todos los días. ¿Tu familia? Pasa tiempo con ellos. ¿Cumplir algún sueño? Entonces busca los caminos que te lleven a él, todos los días. No es fácil, hay que trabajar, dicen muchos, pero sinceramente si tienes un trabajo que te exprime 12 horas diarias y no te deja tiempo ni energías para nada más, entones al final habrás gastado tu vida en trabajar y esto no tiene sentido alguno, porque no tendrás tiempo para disfrutar del dinero que ganas.
Ahora bien, si estableces prioridades y las tienes claras, procura recordarlas todos los días. Quizá sirva poner un recordatorio, como una imagen en tu celular o una nota en tu habitación. Eso te ayudará a obligarte a dedicar el tiempo a ello. Eso sí, cualquier cosa que valga la pena requiere constancia.
Haz que sea divertido organizar
Ahorrarás mucho tiempo si organizas tu espacio físico. Haz que sea divertido, decóralo a tu gusto o compra objetos que te recuerden algo importante de ti mismo, como una figura de acción de Batman, un disco de tu artista favorito, un libro que te haya marcado.
Colocarlo en tu espacio personal te ayudará a sentir un compromiso y sentido de propiedad contigo mismo. Si tu espacio está organizado, demorarás mucho menos tiempo realizando algunas actividades. También ten por escrito lo que quieres hacer. Si consigues una libreta que te guste y tus lapiceros favoritos, va a ser más entretenido.
Levántate temprano
¿Es duro? Sí, pero hace que te rinda mucho el día y si además haces ejercicio siquiera 30 minutos, notarás que la administración del tiempo también depende mucho de las energías que se tengan. Cuando tienes más energía, tu cerebro funciona de forma más rápida. Puedes terminar tus tareas de forma más efectiva y rápida. Además sentirás mucha satisfacción, pues el cerebro segrega serotonina cuando haces ejercicio. Y para esto puede funcionar lo que más te guste: bicicleta, bailar, la cuerda, etc.
Establece una hora al día para ti
Y haz lo que te gusta, cantar, pintar, bailar, escribir, leer. Puede ser muy fácil pensar que ese tiempo es perfecto para dormir porque quizás te sientas muy cansado, sin embargo, hacer lo que te gusta es una forma muy efectiva de descansar. Además, piensa lo siguiente: si te gusta leer y dedicas una hora diaria a esto, es probable que al final del año hayas leído unos 15 libros, si te gusta pintar, al final del año tus pinturas habrán sido mejor que lo que son ahora, y así sucesivamente. No te dejes engañar de la pereza
Respeta los hábitos necesarios
La cuestión del tiempo también tiene que ver mucho con las energías. Cuando estás muy cansado el tiempo no te rinde porque haces todo desmotivado y lento, además es muy probable que te salgan mal las cosas y tengas que volver a hacerlas. Adicionalmente, si no duermes y comes bien en algún momento te vas a enfermar e ir al médico requiere mucho tiempo que no querrás invertir en ello. Haz que el tiempo de comida y sueño se respete, imponlo ante los demás porque es lo humano. Eso sí, no te excedas más de lo necesario.
Establece horas de desconexión tecnológica
A veces gastas muchísimo tiempo en redes sociales o respondiendo mensaje sin importancia. Optimiza el tiempo que les dedicas, mira las fotos de las personas que te interesan, responde y envía los mensajes que necesites o quieras enviar, pero úsalas lo menos posible. En un futuro no querrás pensar en tus días pasados y darte cuenta de que todo lo que hiciste fue ver Instagram y videos estúpidos de Facebook.
Finalmente, no te afanes
Vivir de afán es muy tedioso. Desacelerarte te quita tiempo. Tómate las cosas con calma. Optimiza el tiempo que pasas en el trabajo para que no tengas que llevártelo a casa y ponte metas progresivas para que lo termines a tiempo y sin correr. Si vives siempre corriendo no vas a disfrutar nada. Procura ser puntual porque es parte de optimizar el tiempo. No obstante, si no pudiste llegar a tiempo a un lugar, ya no te estreses. Eso no logrará que cambies la marcha del reloj.
Fuente: https://www.entrepreneur.com/article/307360