¿Cómo renunciar a mi trabajo en buenos términos y sin dramas?
Para un empleado, renunciar a un trabajo puede ser un alivio, ya sea porque dejamos de lado una actividad o ambiente que ya no disfrutábamos, o porque en nuestro nuevo empleo tendremos un mejor salario y oportunidad de crecimiento.
No obstante, esto es un problema para la empresa, pues el trámite conlleva costes burocráticos de todo tipo, desde la gestión de la renuncia, hasta el proceso de contratación para encontrar un sustituto para tu puesto; por todo esto, las renuncias no suelen ser bien recibidas.
Pero, ¿cómo irnos de una compañía, sin generar una mala impresión? Esto es importante, pues así tendremos la posibilidad de recibir cartas de recomendación del lugar que dejamos o incluso la puerta abierta, en caso de querer regresar, sin importar el motivo por el que te vayas, porque no sabemos las vueltas que dará la vida.
Ahora aquí te compartimos algunos consejos para renunciar en buenos términos:
Tener una oferta segura
Se recomienda que antes de renunciar ya tengas una oferta laboral o plan al respecto, pues las decisiones tomadas por impulso no siempre llevan a los mejores caminos. Si ya tienes una propuesta, puedes tomarla como una justificación para tu renuncia, además de que te ahorrarás el estrés que viene de la mano con el desempleo.
Crea el momento adecuado
Si ya decidimos renunciar y hemos pensado en qué decir, sólo falta crear el momento ideal, que será una conversación privada entre nosotros y el jefe. Recuerda que siempre, antes de que se enteren todos, debes hablar primero con él.
Siempre agradecer
Aunque hayas odiado trabajar en ese lugar, debes ser agradecido en lo formal, para evitar cualquier clase de hostilidad. Quizás no fue la mejor experiencia, pero aprendiste algo nuevo, por ejemplo, en qué fijarte al momento de aceptar un trabajo.
Avisar con anticipación
Nada peor para una empresa que las renuncias de un día para otro, o cuando acabamos de ser contratados. Aunque la ley no tiene como tal unos días establecidos para avisar nuestra renuncia, el protocolo dice que lo ideal es notificar con un mínimo de dos semanas de anticipación, de ser posible, un poco más.
Sé discreto
Evita que haya chismes, mejor por eso habla primero con tu jefe; tampoco trates de abundar mucho en la razón por la que decidiste renunciar.
No dejes tareas a medias
Antes de irte, procura haber terminado todas tus labores; es poco profesional dejar proyectos a la mitad o dejar problemas sin haber sido resueltos. Hay que asegurarse de dejar un puesto de trabajo limpio en todos los sentidos.
Ofrecernos a capacitar a alguien más
Puedes sugerir a alguien que pueda ocupar tu puesto de trabajo, pero sino, ofrecerte a capacitar a un nuevo empleado, para que no se vea afectado el ritmo de trabajo de una empresa y así, saldrás con una buena reputación.
Con información de Mi Trabajo.
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