Cómo se relaciona la dependencia emocional con una baja autoestima
El humano es un ser social por naturaleza, por lo cual tenemos esa necesidad de pertenecer a una sociedad o un grupo, así como agradar a los miembros de esos colectivos. No obstante, depender emocionalmente de otros puede relacionarse con una baja autoestima.
Cuando estás en la adolescencia, esta búsqueda de aceptación se vuelve más latente, queremos evitar el rechazo, pero, ¿a qué se debe esto? Pues bien, cuando un niño se está desarrollando, requiere de cubrir sus necesidades básicas, entre ellas las sociales. Si esta no se satisface correctamente, puede llegar a afectar la forma en la que te relacionas con otras.
Healthline señala que depender, hasta cierto punto, de otra persona emocionalmente es saludable y hasta necesario: son aquellos quienes te quieren los que se encargan de darte ese apoyo cuando lo necesitas. No obstante, cuando rebasa los límites sanos es cuando esperas que otros resuelvan esas necesidades emocionales por ti, sin que te esfuerces por hacerlo tú misma.
Entendemos la autoestima como ese valor que te das a ti mismo como persona, de ahí derivan otros términos relacionados con el amor propio. Son muchos los factores que pueden hacer que esta se dañe, comúnmente vienen desde la infancia o de experiencias que tienen que ver con el rechazo.
Cuando los problemas de baja autoestima y dependencia emocional se unen, pueden llevarte a involucrarte en relaciones intensas en cuanto a sensaciones, pero también caóticas. Dentro de todo este desorden, puedes verte envuelta en las redes de una persona que te manipule o vivir en un ambiente tóxico.
¿Cómo te puede afectar este combo negativo?
3.- Problemas de pareja
Al sentir una fuerte ansiedad hacia el rechazo, no estas segura de si tu pareja te ama lo suficiente o no. Puedes llegar a sentir que no eres suficiente para merecer dicho cariño, pero sus muestras de afecto te conforman por ratos. Dicha interacción es dañina para tu salud mental y emocional, por lo cual se recomienda acudir con un psicólogo.
2.- Te sigue el estrés
El estrés puede generarte cambios repentinos de humor, incluso llevarte a la depresión si no lo canalizas bien. Esto puede ser provocado por la baja autoestima y la dependencia emocional con respecto a tu pareja o alguien a quien ames.
1.- Descuidas el cuidado personal
Cuando dependes del apoyo de otros para cubrir tus necesidades emocionales, tiendes a descuidarte. De esta forma, cuando esa persona no puede ayudarte, entras en crisis. Por eso es importante atender la salud mental propia para conocerte y poder canalizar tus propias emociones a tu manera.
Con información de Soy Aire.
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