Conoce el kéfir de leche y sus beneficios para la salud
¿Habías escuchado sobre el kéfir? La palabra de origen turco significa ‘sentirse bien’, y es una bebida láctea fermentada, parecida al yogurt, la cual se consume desde hace cientos de años en Europa del Este.
Especialmente en la región montañosa del Cáucaso, quienes mejoraron poco a poco la manera artesanal de producirlo, se caracterizaban por ser muy sanos y longevos.
Lo anterior llamó la atención del microbiólogo Elie Metchnikoff, quien después de realizar varios estudios, relacionó ese estado de salud con el consumo del kéfir.
Contiene una gran cantidad de microorganismos benéficos, conocidos como probióticos, que forman parte de nuestra flora intestinal. Al tenerlos en cantidades adecuadas, mantienen a raya a microorganismos patógenos que producen infecciones.
También promueven la absorción de calcio, hierro y magnesio, así como estimulan nuestro sistema inmune para que nos proteja de manera más efectiva, entre otros beneficios.
Su color va de blanco a cremoso y proporciona una variedad de ventajas nutricionales, pues durante la fermentación de la leche, la lactosa y las proteínas se transforman en moléculas que favorecen la fácil digestión, así como la mayor biodisponibilidad de los nutrientes.
El kéfir también mejora el sistema digestivo al modificar la microbiota intestinal e incorporar probióticos, prebióticos y enzimas extracelulares.
Otros beneficios que señalan los expertos incluyen efectos antihipertensivos, antialérgicos, anticancerígenos, reductores del colesterol y otros.
Hay que mencionar que para que los beneficios se presenten, el consumo de kéfir debe ser continuo y en cantidad suficiente, de tal forma que garantice la llegada de los probióticos al intestino y su permanencia en el mismo.
Con información y gráfico del CIAD.