Día de la Virgen de Guadalupe: Así se originó la celebración del 12 de diciembre
Este 12 de diciembre, se conmemora el 489 Aniversario de la Aparición de la Virgen de Guadalupe, una fecha que muchos mexicanos y fieles alrededor del mundo celebran con mucha devoción.
De acuerdo con el Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, desde el siglo XVII el culto a la ‘Morenita’ se ha incrementado, pues cada año millones de creyentes llegan a la Ciudad de México para agradecerle las bendiciones dadas o simplemente a venerar su imagen.
Es preciso mencionar que la celebración dedicada a la Virgen de Guadalupe viene desde los primeros años después de la Conquista de México, por ahí del año 1525, cuando frailes franciscanos construyeron una capilla en el cerro del Tepeyac, ubicado al norte de lo que hoy es la Ciudad de México.
El cerro fue hogar de un santuario prehispánico en el que se veneraba a diversas deidades, entre ellas Tonantzin (“nuestra madre”) Cihuacóatl; diosa que personificaba, entre otras cosas, las fuerzas femeninas de la fertilidad.
De acuerdo con los historiadores, la capilla que se edificó fue dedicada a la virgen María como madre de Dios, sin aludir a una imagen específica.
Se dice que Bernardino de Sahagún afirmaba que esta acción representó un culto de sustitución; es decir, la intención de los frailes era que los mexicas cambiaran la devoción que tenían a Tonantzin por la de la virgen María.
Actualmente no existe información precisa sobre el momento en el que los frailes colocaron el manto de la Virgen de Guadalupe, que hoy se encuentra en la Basílica, pero el Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM afirma que a mediados del siglo XVI, la imagen ya contaba con numerosos devotos.
Fue el 12 de diciembre de 1531, que el indígena Juan Diego Cuahtlatoatzin, nativo del cerro del Tepeyac, fue testigo de la aparición de la Virgen de Guadalupe.
De acuerdo con la biografía de Juan Diego, publicada por el Vaticano, mientras el hombre se dirigía a pie hacia Tlatelolco, “en un lugar denominado Tepeyac tuvo una aparición de María Santísima, que se le presentó como la perfecta siempre Virgen Santa María, Madre del verdadero Dios”.
La Virgen le hizo el encargo de que en su nombre pidiera al Obispo Juan de Zumárraga la construcción de una iglesia en el lugar de la aparición.
Fue el martes 12 de diciembre, mientras el hoy Santo se dirigía a la ciudad, que la Virgen se le presentó de nueva cuenta y le invitó a subir hasta la cima de la colina de Tepeyac para recoger flores y traérselas. Pese al clima invernal y la aridez del lugar, Juan Diego encontró unas hermosas flores.
Ya con ellas, las colocó en su tilma y se las llevó a la Virgen, quien le pidió presentarlas al Obispo como una prueba de veracidad. Cuando las llevó ante Juan de Zumárraga, el Santo abrió la tilma y dejó caer las flores, mientras en el tejido apareció de manera inexplicable, la imagen de la Virgen de Guadalupe, que desde entonces se convirtió en el corazón espiritual de la Iglesia en México, según describe la biografía.
Si bien la historia de la celebración de la religión católica inició en nuestro país, es una fiesta que se extendió al resto de América Latina y diversas zonas del mundo.
Con información de UnoTV.