Este es el tiempo recomendado para que niños pasen ante sus dispositivos electrónicos
Si bien hemos escuchado que no es conveniente exponer a los niños frente a las pantallas por mucho tiempo, actualmente puede parecer imposible mantener un control real sobre cuánto usan sus dispositivos electrónicos.
No obstante, los problemas que esa falta de regulación puede traer siguen siendo descubiertos por los pediatras.
También es difícil establecer un punto medio entre el uso excesivo de pantallas, pues las condiciones sociales y necesidades de cada familia, pero algo en lo que todas las investigaciones coinciden es que su uso debe estar prohibido antes de los dos años de edad.
Tanto la OMS como la Asociación Mexicana de Psicoterapia y Educación presentaron reportes derivados del aumento en el uso de dispositivos electrónicos que dejó la pandemia.
Por su parte, la Asociación Española de Pediatría compartió el Plan Digital Familiar, que consiste en una plataforma en la cual los líderes de familia pueden ingresar para encontrar la mejor manera de establecer límites sanos para el tiempo en pantalla, de acuerdo con sus necesidades.
Elaborada con información publicada en Xataka México.
Investigaciones de la OMS en 2019 exponen que permanecer sedentarios por mucho tiempo puede generar graves problemas a la salud física de los niños. Si a esto se agrega que ese tiempo lo pasarán frente a una pantalla, las afectaciones se extienden también a la salud mental y visual.
Un artículo del Centro Médico del Hospital de Niños de Cincinnati encontró que los niños que dedican más tiempo frente a una pantalla, tienen una menor integridad estructural de la sustancia blanca en regiones del cerebro que juegan un papel importante en el lenguaje y otras habilidades emergentes de alfabetización.
Se observó que los menores con mayor exposición a la pantalla tenían un lenguaje expresivo más pobre y resultaron peores en las pruebas de velocidad de procesamiento del lenguaje, como nombrar objetos rápidamente.
Asimismo, los estímulos de dispositivos como los videojuegos sobreestimulan los receptores de dopamina de manera similar a como lo hacen las drogas; a largo plazo, los receptores necesitarán estímulos más intensos para obtener dichos resultados.
La sobreexposición a pantallas también afecta al sueño, pues estos dispositivos alteran los ritmos circadianos, que siguen un ciclo de 24 horas y responden a la luz y la oscuridad.
El Instituto Nacional de Ciencias Médicas Generales de Estados Unidos encontró que la luz de los dispositivos electrónicos puede confundir los relojes biológicos, lo que causa trastornos del sueño y produce otras afecciones crónicas, como depresión.
Con información de Xataka México / Imagen de master1305 en Freepik.
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