Hábitos que dañan tu autoestima sin que te des cuenta
El amor propio es muy importante y un aspecto que muchas veces damos por sentado. Esto puede definir la forma en la que interactúas con otras personas, ya sea para entablar una relación de cualquier tipo o no.
No obstante, hay algunos hábitos que dañan tu autoestima a diario, sin que te des cuenta. Son los pequeños detalles que creemos no tienen ninguna importancia, los que hacemos sin pensar, que son parte de una costumbre tóxica sin intención de serlo.
Estar conscientes de este tipo de hábitos es el primer paso para convertirlos en algo positivo, tanto para ti como para otros.
5.- Te quejas constantemente
Quejarte cuando algo no te parece es normal, pero el problema está cuando se vuelve tan constante que dejas de notar lo positivo de tu entorno. Al final, se trata de expresar algo negativo de lo que ves o vives, pero esa negatividad puede imposibilitarte de ver más allá y se voltea en tu contra.
4.- Usas lenguaje negativo
Al hablar de lenguaje tóxico, se refiere a frases negativas que emites constantemente como “soy lo peor”, “soy fea” o “no sé hacer nada”.
Si bien en algún momento todos hemos caído en ellas, es importante detener el comportamiento y convertirlo en algo positivo. Puedes empezar por verte en el espejo y nombrar solo aspectos positivos de tu persona.
3.- Caes en la procrastinación
Todos tenemos responsabilidades en la vida, pero cuando las dejamos para después porque creemos que hay suficiente tiempo, terminan por acumularse; esto puede causarte inseguridades, empiezas a sentirte incapaz de cumplir con todas las tareas a tiempo y poco a poco ese sentimiento de frustración se traslada a otros ámbitos.
2.- No tienes tus prioridades en orden
Ayudar a los demás antes que a uno mismo es tóxico para tu autoestima, pues puedes caer en dejar tus necesidades al final por satisfacer las de otros. Antes de brindar apoyo a alguien más debes asegurarte de estar bien tú.
1.- Te exiges más de la cuenta
Uno mismo puede ser su peor crítico, lo cual podemos ver más en el trabajo o al realizar cualquier otra actividad. Siempre pensamos que podemos dar más y lo hacemos, pero luego nos exigimos más y más hasta que nuestras ideas se vuelven irreales. Pasa mucho cuando alguien es perfeccionista, pero hay que tener cuidado y darnos ‘chance’ de cometer errores, pues es algo normal y forma parte de nuestro crecimiento.
Con información de Soy Aire.