¡Identifícalos! Estos son 12 ejemplos de violencia psicológica
La violencia psicológica, abuso psicológico o emocional, es aquella conducta que una persona utiliza para tratar de someter o humillar a otra mediante diversas prácticas, sin que haya una agresión física de por medio.
Este tipo de comportamientos puede generar diferentes secuelas en la víctima, como síntomas de ansiedad y/o depresión, hasta un trastorno por estrés postraumático. En función de la frecuencia e intensidad de los mismos, así como de las características del agredido, los traumas serán más o menos graves.
Como en todas las agresiones, ésta se basa en un desequilibrio por el cual el agresor toma una posición de poder frente a la víctima, que se subordina y se ve obligada a actuar bajo su control.
Si bien este tipo de comportamientos puede darse en cualquier contexto, hay algunos donde es más habitual encontrar este tipo de situaciones, como en las familias, en la pareja, el trabajo, etc.
Existen diferentes ejemplos de violencia psicológica, los cuales enumeraremos a continuación, para que logres identificar cualquier acción que pudiera llevarse en tu contra o de algún ser querido, y puedas tomas cartas en el asunto.
1.- Intimidación
Este es uno de los ejemplos de violencia psicológica más claros. Una actitud intimidatoria hacia otra persona, ya sea mediante gritos o actitudes, como una postura corporal amenazante, son comportamientos que pueden generar daño psicológico en la víctima, que puede agudizarse si en lugar de un agresor hay varios, pues el efecto se multiplica ante la percepción de un riesgo mucho mayor.
2.- Amenazas
Aquí hablamos de comportamientos amenazantes claros, que pueden ser verbales o conductas físicas que anticipen una agresión inminente, como elevar un puño al aire.
Aunque no llegue a materializarse la acción, pues ya estaríamos hablando de otro tipo de violencia, esta no deja de ser uno de los ejemplos de abuso psicológico, ya que la víctima experimenta miedo y ansiedad.
3.- Insultos
Son otra forma de abuso emocional sobre quien los recibe, pues la persona se ve denigrada y esto genera un daño en su autoestima. Los insultos reiterados pueden llegar a ser una forma de violencia psicológica lesiva para la víctima.
4.- Humillaciones
Estas acciones demuestran el daño que se puede causar a una persona utilizando solamente nuestras palabras. Las humillaciones pueden ser de muchos tipos, desde el aspecto de la persona, alguna conducta que haya realizado, alguna característica en particular, etc.
5.- Rechazo
Cuando un individuo o grupo de personas decide deliberadamente aislar a otro y excluirlo de toda actividad y relación social, acabará por sufrir las consecuencias psicológicas de dichas conductas.
6.- Aislamiento forzoso
Por sus características es más habitual en parejas. En este caso, uno de los miembros comienza a coartar la libertad de la otra persona para relacionarse con otros o hacer determinadas actividades. Poco a poco la va aislando hasta que toda su vida gira exclusivamente hacia su agresor.
7.- Destrucción de bienes
Implica daño físico, no a la persona como tal, pero sí a un elemento que es de su propiedad y por lo tanto le está generando un perjuicio. Además, puede percibirse una amenaza velada tras esa conducta, pues la víctima puede tener miedo de sufrir también una agresión en cualquier momento.
Existe otra variante en la que el agresor en lugar de dañar un objeto, ejerce la violencia sobre un animal, porque es propiedad de la víctima. Es una forma aún más cruel y clara de abuso emocional, en la que además hay otro ser vivo sufriendo por ello.
8.- Autoritarismo
El propio desequilibrio en una relación entre dos personas puede dar pie a un autoritarismo en el que, a través de los puntos anteriores, el agresor logra una posición permanente de poder en lo que logra que se cumplan todas sus decisiones y mandatos, sin tener en consideración los deseos de la víctima.
9.- Chantaje
A través del chantaje, la persona puede ejercer un daño emocional en el otro individuo para conseguir sus propósitos. Un caso es poner en duda los sentimientos hacia el agresor si la otra persona no está dispuesta a realizar determinada conducta.
10.- Críticas desproporcionadas
Si la crítica es constante, no se sustenta en datos reales y además se utiliza para denigrar al individuo, constituye un claro ejemplo de violencia psicológica.
11.- Negación de los sentimientos
Si un individuo experimenta determinada emoción, generalmente negativa, y otra persona, de manera reiterada, no solo no le valida dichas emociones, sino que además le desprecia y considera que no están justificadas, ejerciendo abuso psicológico en ella.
12.- Control
Si bien puede ser una mezcla de otras acciones que ya hemos visto, el control puede tomar otras formas y ser menos evidente. En ocasiones se traduce en una revisión de las acciones del prójimo, como con quien ha estado, con quién ha hablado, qué personas sigue en sus redes sociales, etc.
Actualmente, el control del teléfono, por ejemplo en la pareja, es otro de los ejemplos de violencia psicológica más habituales que podemos encontrar.
Con información de Psicología y Mente.