Pruebas genéticas a los restos de un venerado guerrero vikingo revelan que era… una mujer
Los temibles y crueles vikingos que tuvieron atemorizados a comunidades enteras no solo eran barbudos. Un guerrero de alto cargo que fue enterrado con honores ha resultado ser una mujer. Así que quizá podríamos despedirnos de cómo creíamos que se organizaba su sociedad.
Un análisis de ADN ha desengañado a arqueólogos acerca del sexo de unos restos que se extrajeron tras excavar en 1880. Lo que descubrieron en aquel año en Birka, uno de los mejores asentamientos vikingos conservados en Suecia, fue una importante tumba del siglo X. La tumba, que se conoce con el nombre de Bj581, presentaba un esqueleto acompañado de un espada, dos escudos, un hacha, flechas de armadura y dos caballos. Aparecía a su lado también un tablero utilizado para elaborar la estrategia militar de las batallas. Dieron por sentado que aquel guerrero era un hombre.
Aunque relatos vikingos hacen referencia a feroces luchadoras se consideraban historietas mitológicas. Algo inventado, de ficción, absolutamente no real y tuvo que pasar un siglo para que hubiera una ligera sospecha de los huesos honrados en ese cementerio eran de una guerrera. En 1970 un análisis morfológico reveló que el esqueleto encajaba más con el de una mujer y otro realizado el año pasado apuntó en la misma dirección.
Para solventar la duda, los investigadores de la Universidad de Upsala decidieron recurrir la prueba génetica. En el ADN de su esqueleto observaron que había un par de cromosomas X, ni rasgos de la Y. Además, el análisis de los dientes mostró que gran movilidad geográfica. En resumen: había embarcado y dirigido las batallas ella. Cuando murió a los 30 años -edad estimada-, se la sepultó con honores.
“El conjunto de juegos indica que ella era un oficial, alguien que trabajó con táctica y estrategia y podría conducir a las tropas en la batalla”, escribe Charlotte Hedenstierna-Jonson de la Universidad de Estocolmo, que dirigió el estudio publicado en la revista American Journal of Physical Anthropology. “No es una clásica valkiria como las que aparecen en las sagas, sino una líder militar real, que ha resultado ser una mujer”.
A pesar de que los huesos no se aprecien heridas de arma, algo que se utilizado para señalar que podría no haber batallado ni ser una guerrera, lo cierto es que otros restos analizados en las tumbas de Birka tampoco presentan lesiones. El hallazgo no solo tiene relevancia para cambiar nuestra idea sobre las sociedades vikingas, también pone sobre la mesa los sesgos de género en las investigaciones. Se asumió ciegamente que era un hombre.
http://www.playgroundmag.net/noticias/actualidad/guerrero-vikingo-mujer-prueba_ADN-Birka_0_2046395352.html