Emociones

Rasgos y hábitos característicos de las personas impulsivas

Fotografía de Freepik.

La mayoría de los seres humanos son capaces de dominar sus impulsos, pues la experiencia y aprendizaje nos enseñan que sacrificar todo por satisfacer una necesidad inmediata no compensa.

Sin embargo, hay casos en los que esto sólo se aprendió a medias, pues todos conocemos a una persona impulsiva, con dificultades para confrontar toda clase de deseos.

A continuación, hablaremos sobre los hábitos y rasgos de este tipo de personas, de los cuales destacan los siguientes:

No toleran bien la espera

La capacidad de la demora de la gratificación tiene que ver con cuál es el límite para abstenernos a disfrutar en el presente, para poder disfrutar más en el futuro.

Las personas impulsivas suelen tener una baja capacidad de demora de la gratificación, lo cual se nota en cómo gestionan su dinero, consumir alimentos y hasta al relacionarse con otras personas.

Caen en la procrastinación

Estas personas postergan constantemente una obligación o responsabilidad, lo cual va de la mano con una sensación de pérdida de control, como si algo nos orillara a no realizar una tarea a pesar de que sabemos que debemos hacerla ya.

En muchos casos, esta acción es racionalizada al cabo de un tiempo, creando un argumento “racional”, que nos permite sentirnos mejor con nosotros mismos.

Las personas impulsivas son procrastinadoras, por lo cual es muy frecuente que no cumplan con sus compromisos dentro de lo establecido, o que lo hagan mal a causa de una mala gestión del tiempo.

Conductas compensatorias

Ante las situaciones de frustración, las personas impulsivas tienen mayor tendencia a caer en conductas compensatorias, que son una manera de liberar la ansiedad de una manera automática e inmediata, como tocarse mucho el pelo, caminar en círculos o comer.

La posibilidad de ‘distraerse’ comiendo dulces o carbohidratos es atractiva para quienes sienten ansiedad y estrés, pero no encuentran la manera de terminar con la raíz del problema, pues eso conllevaría cumplir con metas a mediano o largo plazo.

Son propensas a enojarse

Les cuesta mantener una actitud constructiva que les permita transformar el conflicto en un encaje entre posiciones con intereses propios.

Eso significa que, en un conflicto, la parte no impulsiva va desde una situación de ventaja, ya que su rango de posibles reacciones es mayor y, a la vez, puede predecir mejor el comportamiento de quien se caracteriza por su impulsividad.

Otra de las implicaciones de esto es que las personas impulsivas son malas mediando en discusiones, pues fácilmente se posicionan en contra de alguien.

Tendencia a compras impulsivas

Las personas impulsivas son fáciles de convencer para pagar por algo en lo que ni siquiera pensaban al iniciar sus compras. Con un empaque atractivo o un slogan pegadizo, basta para hacerles comprar, y lo mismo ocurre con las ofertas de ocasión, pues agregan un motivo para comprar en el momento sin pensarlo mucho.

Con información de Psicología y Mente / Imagen de cookie_studio en Freepik.

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