Participa o muere.
Por Lic. Óscar Octavio De La Cruz Rodríguez
Después de los informes de gobierno, en los que como ciudadanos debimos estar al pendiente de las cuentas que rindieron nuestros gobernantes, creo que también tenemos la obligación de reflexionar y ver que tanto tú y yo, hemos aportado como ciudadanos a favor de nuestra propia sociedad, es por eso que hoy hablaré sobre la importancia de la participación ciudadana en una Democracia.
La Democracia se basa en el reconocimiento de que todo gobierno emana del pueblo, es decir, desde el momento en el que elegimos a nuestros gobernantes mediante el voto; además de esto, también debería de caracterizarse por la participación tuya y mía en las decisiones gubernamentales, pero en la práctica, son muy pocos los ciudadanos que realmente participan en la resolución de sus propias problemáticas.
Reitero, una verdadera Democracia debería garantizar las libertades básicas del individuo, así como la efectividad de la libre elección para los cargos de gobierno y la posibilidad de un control, por parte del pueblo, sobre la gestión gubernativa.
En pocas palabras, la Democracia empieza en el pueblo y se debe ejercer para beneficiar al pueblo.
Para que ésta funcione, se necesita de la participación ciudadana no simulada por parte de los que conformamos una nación.
Es ineludible elevar la voz con valor y respeto cuando sea necesario para ser escuchado por aquellos que con nuestro voto llegaron a formar parte del Gobierno.
El desarrollo de un pueblo depende mucho de la participación de sus ciudadanos y de cómo formamos a esos futuros ciudadanos.
Según el INEGI, tan solo alrededor del 1% de la población mexicana, forma parte de asociaciones civiles registradas y realiza el trabajo de voluntariado.
También hay que tomar en cuenta a todas esas asociaciones que trabajan sin estar legalmente constituidas y todas esas personas que por su propia cuenta ayudan a su prójimo.
En México, nos falta mucho por hacer en cuanto a la participación social organizada, ya que solamente hay una OSC legalmente establecida por cada 5,750 habitantes, mientras que en Estados Unidos hay una por cada 156 estadounidenses, y en Canadá una por cada 35 habitantes.
El número de empleos que genera las OSC, es otro indicador que mide el grado de participación de la sociedad; en nuestro país éstas asociaciones difícilmente cuentan con personal contratado ya que muchas veces no alcanza para pagar el costo de una nómina por falta de recursos.
Es importante que reconstruyamos el tejido social de nuestra nación; que el trabajo a favor de la sociedad desde los diferentes ámbitos en los que nos desarrollemos generemos cohesión social y luchemos todos por un bien común.
Como conclusión considero que no debemos dejar todo en las manos del Gobierno, como sociedad nos hace falta participar más en las decisiones trascendentales para el desarrollo de nuestra región y nación, hagamos que nuestra voz sea escuchada acompañada de nuestra aportación.
Me despido con la siguiente reflexión, parafraseando a JFK, no veas que tanto puede hacer tu país, estado o ciudad por ti, sino que tanto puedes hacer tú por mejorar tu sociedad.
Por mi parte es todo, pero recuerde que hoy es un buen día para ser mejor. Muchas gracias y nos leemos la próxima semana.
Lic. Óscar Octavio De La Cruz Rodríguez
Premio Nacional de la Juventud.
Tres veces Premio Estatal de la Juventud.
Dirigente de Revo Sonora, movimiento de profesionistas a favor de un #InternerSeguro
Twitter: @_oscardelacruz